Por: Enmanuel Peña Feliz- Centro de Producción UDECA
Mayo es considerado el mes de las advocaciones marianas en Latinoamérica, ya que para el siglo XIX “Los treinta días a María” se celebraban en mayo, pues es un mes al que se le relaciona con las flores y el día de las Madres. Incluso, se contaba con devociones especiales en honor a la Virgen María, organizadas para cada día del mes.
Una de las advocaciones que más se resalta es la de Nuestra Señora de Fátima, patrona de los devotos del Inmaculado Corazón de María en Francia y de varias comunidades en República Dominicana. También se destaca la Visitación a la Virgen, acompañada de las siguientes celebraciones marianas: Santa Demotila, María Reina de los Apóstoles, María Madre de la Iglesia, Santa Joaquina Vedruna, Santa María Auxilio de los Cristianos y la Santísima Trinidad.
Otras advocaciones en Latinoamérica son: Nuestra Señora de Guadalupe en México, La virgen del Lujan en Argentina, Nuestra Señora de Copacabana en Bolivia, Nuestra Señora de Aparecida de Brasil, La Virgen del Carmen del Maipú de Chile, Nuestra Señora de Chiquinquirá en Colombia, Nuestra Señora de los Ángeles en Costa Rica, La Caridad del Cobre en Cuba, Nuestra Señora del Quinche en Ecuador, La Virgen del Pilar en España, Inmaculada Concepción de Estados Unidos de Norte América, Santa María del Rosario en Guatéamela, Nuestra Señora del Perpetuo Socorro en Haití, Nuestra Señora de Suyapa en Honduras, Nuestra Señora de Guadalupe en México, La Inmaculada Concepción de EL Viejo (La Purísima) en Nicaragua, Santa María de la Antigua en Panamá, Nuestra Señora de los Milagros de Paraguay, Nuestra Señora de la Merced en Perú, Nuestra Señora de la Divina Providencia en Puerto Rico, Nuestra Señora de la Altagracia en República Dominicana, Nuestra Señora de la Paz en el Salvador y Nuestra Señora del Coromoto en Venezuela.
En República Dominicana, hay dos advocaciones. Nuestra Señora de la Altagracia o Virgen de la Altagracia es una advocación mariana católica considerada como la «madre protectora y espiritual del pueblo” que se celebra cada 21 de enero y la Virgen de la Merced o Nuestra Señora de las Mercedes patrona del pueblo Dominicano, su festividad se realiza el 24 de septiembre.